Ven junto a mí y dime despacito
esas palabras tuyas de amor,
ven y dilas suavemente a mi oído,
tierna y tranquila, con mucho candor.
Ven y dime cuánto me quieres,
estaré atento a tus mimos,
ven y dilo suavemente a mi oído,
te escucharé atento como un niño.
Ven y dime todo eso mi amor,
que soy manantial para tí,
dilo despacio a mi oído, por favor,
quiero escucharte, hazme feliz.
|