¿Donde están?
Aquellas manos llenas de ternura
que acariciaba mi cuerpo
y respetaban mis mejillas.
¿Dónde está?
Aquella mirada ilusionada
que hacía temblara mi alma
al ver tu hombría reflejada.
¿Dónde está?
Tu sonrisa desenfadada
que alegraba mi vida
que me daba esperanzas.
La soberbia engalanada
de prepotencia, violencia
y cobardía... llegó a mi vida
me arrebató tu sonrisa,
tus caricias, tu mirada.
Los rescoldos del amor
se hacían cenizas,
las ilusiones se morían.
Nubes negras sobre mis tejas
anidaban... se cernían.
Por una grieta de la vida
huí despavorida
se desgarró mi alma
al cruzarla en la huida.
Atrás dejé olvidada
a mi dignidad herida.
La miré desde lejos
y supe que jamás
tendría en mi cuerpo
sus reflejos.
¿Aprender a vivir si ella?
Estoy en ello.
|