Cuando este camino recorría
a los ángeles una vez pregunté
¿es que esta vida sola pasaría
sin la bella amistad que siempre soñé?
Y entre lágrimas y melancolía
por fin un día contigo tropecé
no sospechó entonces el alma mía
que el cariño crece pero no se ve
Llegaste con tu rayo de alegría
con tu apoyo, chistes y tu nobleza
demostrando tu amistad amiga mía
Hoy no puedo ocultar esta tristeza
pues esa enfermedad, silente arpía,
consume tu salud y tu entereza
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