Ay amor como te extraño,
en esta noche fría,
la calidez de tu cuerpo,
que al mio da alegría.
Las caricias de tus manos,
que desatan mis pudores,
los suspiros que me arrancas,
dentro con mil sensaciones.
Amame como solo tu sabes,
amor de mis amores,
ámame hasta que no pueda más,
y me olvide de mis nombres.
Amame en la madrugada,
cuando me vence el sueño,
cuando mi cuerpo languidece
entre tus dedos y sudores.
Amame, mátame ya de amor,
sin trégua, mis rendiciones,
muriendo te canto mi amor,
sin condición ni peticiones.
Ahora revivo esas ocasiones,
bajo el recuerdo de tu voz,
cuanto me dices al oido,
como si fueran oraciones.
|