Mas hoy debo olvidar esa rabieta
que hasta el final resulta convincente
pero poco conforme con mi mente
para estar en la línea de meta.
Pues llevando mi vida en la maleta
a resguardo de algún inconveniente,
que pueda suceder entre la gente,
voy confuso con mi alma de poeta.
Mientras la imagen de ese ayer borroso
invada mi presente más auténtico
salpicando de dudas mis flaquezas,
nada hará que me sienta tan dichoso
como manifestar un juicio idéntico
ante cualquier señal sin extrañezas.
|