Te estoy queriendo tanto,
seguro que no adivinas,
oyendo tu voz me alimento,
cual niño con golosinas.
Te estoy soñando hacia mi,
por valles y colinas,
bajo el sol de otoño,
entre brumas y nieblinas.
Te necesito tanto amor,
a horas que no imaginas,
tu mirada, tus susurros,
tus besos y caricias.
Te amo tanto amor,
porque mi vida iluminas,
eres cuanto ansío tener,
cuando la tarde termina.
|