LOS FAVORES NO INSPIRAN GRATITUD
sino más bien deseos de venganza,
así habló Zaratustra, que actitud
mostraba en sus ambientes de confianza.
Yo por si acaso amigo tomo nota
de todo corazón de tus temores,
pues aunque me tomaras por idiota
atención prestaré de mil amores.
Ya sabes que mi meta es el camino
que recorriendo a diario me complace,
tanto que si a menudo pierdo el tino
espero que ningún emir me cace.
Será que dueño soy de mi ventura
y como puedo pago la factura.-
|