SONETO
Disfrutar me propongo a cada instante
porque a sufrir al mundo no he venido,
que de las advertencias yo me olvido
por si algún malhechor me echa el guante.
Ya sé que no resulta interesante
saber que soy austero y precavido,
que malas experiencias he tenido
por exhibir mi trompa de elefante.
Que vidas mágicas color de rosa
pudiera haber en un país lejano
donde sólo el pudiente tiene acceso,
donde de forma opaca y caprichosa
aquel que esconde al disparar la mano
razones, dudo yo tendrá, de peso.
|