La vida es como un restaurante,

donde pedimos una orden y luego la consumimos,

cada vez que tu abres la carta de pedido,

Dios te toma esa petición,



Puede ser una buena o mala elección...de ti depende

puedes pedir amor, amistad, serenidad, humildad,

pero también puedes solicitar mentiras, vanidad, soberbia, engaños,



Podemos mentirle a las personas,

podemos incluso engañarlas sin que ellas se den cuenta

podemos además escondernos de quienes nos rodean

pero nunca...



Nunca podríamos mentirle y engañar los ojos y oídos de Dios.

Por esa razón, ten conciencia en lo que haces o dices,


que El nos observa día con día

y nos lo toma en cuenta para el día final

registra cada una de las acciones de nuestra vida,

lo que hacemos, lo que decimos, lo que engañamos al prójimo

El nos esta observando,

y revisa cada uno de nuestros actos,

para saldar cuentas cuando estemos frente a El...


EN OTRAS PALABRAS DE ESTA VIDA NADIE SE VA SIN PAGAR LA FACTURA QUE DEBE.

¿Te comento algo? Trata de tener saldo a tu favor

Maria*