Soneto.
Hablemos del amor sin más engaños
del que se entrega de verdad sincero,
porque se manifiesta con esmero
sin recurrir a lúgubres apaños.
Y mira que ya tengo muchos años
con fama de sutil aventurero,
que harto de esconderse del cartero
apenas si me rozo con extraños.
Quizás mi escepticismo me delate
haciendo que del sitio no me mueva
reflexionando nuevas aventuras,
si acaso espere un singular rescate,
que me saquen a rastras de la cueva
y cometer cometa mis locuras.-
|