AMOR TIRANO
No es quizás el amor menos tirano,
que siendo un cicerón tan solitario
arrincone mi cuerpo en un sudario,
aborrecido del calor humano.
Porque ese amor herido, no es en vano
el único detalle hereditario,
que habré de confundir por un calvario,
y que al principio suponía sano.
No sé si donde nadie ya me espera
escrito llevo siempre en mi semblante
toda la angustia de un pasado añejo,
tal que un mundo de sombras por bandera
al tiempo me llevara por delante
como quien huye de su propio espejo.-
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