SONETO CAUTIVO
No quieras que la suerte
pasee por delante de tu casa,
como queriendo demostrar de guasa
que tu falta de humor a solas se despierte.
Pues cuando la exigencia nos empuja bien fuerte
toda oportunidad resulta escasa,
viendo además como el ciclón arrasa
incluso con la muerte.
Tener limpia pretendo la conciencia
e ignorar muchos chascos a menudo prefiero
que andar a diario compartiendo penas,
porque tanto incomoda la burda prepotencia
que en mi cabeza nunca yo la quiero
sabiendo cuánto lastran las dichosas cadenas.
|