Al final llegó el hielo,
este silencio eterno,
cargado de reproches,
enfermo, medio muerto.
Vi sin querer ver,
lo que me reservaste
quizás sin querer,
sin avisar, sin merecerlo.
Pero me dio de lleno,
arrancando de cuajo,
amor y sentimiento,
el alma hecha jirones,
y el corazón mal trecho.
Adios amor de un tiempo,
todo llega, todo pasa,
desde la ilusion mas grande,
al dolor mas pequeño.
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