Idilio que rozo el sueño de la pasión,
leal y completo como el campo de
flores en primavera gozando de
la lluvia matinal del alba.
El desborde de la magia entre la piel,
la quietud que logro el beso cautivo,
como la caricia que da el viento a las
hojas en el otoño.
Amantes en tiempo de amor que
logran alcanzar el éxtasis de estar
juntos, como la quietud del mar
después de la tormenta de invierno.
|