Amigo, dónde vas tan apurado,
resolviendo problemas del negocio,
que es algo en ti, tan acostumbrado,
que a veces a errores, yo lo asocio.
¿Dónde piensas llegar con tu fortuna?
que por cierto será muy abundante,
a juzgar la avaricia que en tu cuna,
junto a ti creció, siempre ignorante.
No das de ella, a pobres ni mendigos,
y ante todos te jactas del poder,
que tú con el dinero has conseguido.
¡Que lastima!.. que yo no pueda ver
entre tu gran fortuna, ni a aún amigo,
ni esposa e hijos, que a ti te quieran bien.
|