No he de andar por la vida tan disperso
obligándome a todo más que nada,
cuando mi piel se siente atormentada
en un ambiente hostil y tan perverso.
Quizás sea mejor un universo
donde cada cual cueza su empanada
al ritmo que le venga la cascada
y en su interior se vea bien inmerso.
Ya sé por experiencia del pasado,
que los disgustos cada nuevo día
unidos se disparan a lo loco,
pues al considerarme malparado,
en el medio de tanta algarabía,
desde luego que mucho me ata el coco.
|