SONETO
OBLIGADO A MIRARME EN EL ESPEJO
Obligado a mirarme en el espejo
de los mayores, soy un vagabundo
que ha generado un odio muy profundo
a todo aquel, que al parecer perplejo,
hoy pretenda abusar de mi pellejo,
sea aquí o en cualquier lugar del mundo,
donde por escapar en un segundo
a gritos yo, no sin razón, me quejo.
Nacido del temor y de la angustia
nadie se extrañe si el dolor explota
en el instante menos conveniente,
pues si la cara se me pone mustia
y la barriga anuncia su derrota
responsable no soy ni consecuente.
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