Una noche yo soñé
que en tus brazos me tenías,
pero cuando desperté,
mí cama estaba vacía.
¡Pero es bonito soñar!
aunque no sea verdad,
la vida pasa volando
hay que saber disfrutarla,
aunque lo hagas soñando.
Nuestra vida es tan cortita
que si sabes disfrutarla,
más larga sé no parece,
los pensamientos ayudan
que nos parezca bonita,
¡Así que a seguir soñando!
para llenarla de dicha.
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