Abre mi pecho, encontrarás un corazón que late,
escúchalo atentamente, simplemente no te distraigas;
ese corazón musculoso, sano, lleno de compases,
toca la música de amor que te gusta, que tú bailas.
Ritmo cardíaco, cadencioso, trepidante, afinado;
en cada contracción, una novedosa y fina tonada.
Siempre, cuando me encuentro justo a tu lado,
comienza tocando un concierto desde tu llegada.
Abre mi pecho, encontrarás un corazón que late;
ahí suena una bella música suave, sin igual,
en ese músculo sano, lleno de cadenciosos compases,
ahí late intenso, para tí, un corazón de cristal.
|