Me hundo una y otra vez
en la tristeza, y el llanto
contenido se ahoga en mi garganta.
Mudos mis labios, sin palabras
muerto el corazón se pierde en
negro abismo, la fria palidez
de la muerte ya me abraza.
Recorre poco a poco mi cuerpo
la sangre se congela en mis venas
el dolor de la traición me atravieza
el alma como agudo puñal y siento
QUE ME MATA.
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