☰ menú
//



LA MENDIGA

Esta mujer y su niño
viven vidas amputadas,
se puede ver en sus ojos
que les falta la esperanza.

Quién sabe por qué razón
es la vereda su casa;
por qué la mano extendida
le ruega a todo el que pasa:

Cómpreme, señor, le pido.
Cómpreme, que es poca plata.
Todo seguimos camino
rehuyéndole la mirada.

En sus brazos mece al niño
que sueña con un gigante;
pero se ríen las vidrieras
de que el niño tenga hambre.

La ilusión cae en el cemento
como un castillo del aire:
Se enfrían los sentimientos.
Dios huyó de Buenos Aires.


Daniel Adrián Madeiro

Copyright © Todos los derechos reservados.

Publicado el: 08-10-2002
Última modificación: 00-00-0000


página personal de Daniel Adrián Madeiro


editar deja comentario al poema

regresar




POETA VIRTUAL no persigue ningún fin de lucro. Su objetivo es exclusivamente de carácter cultural y educativo, mediante la difusión de la poesía. Los poemas y cuentos presentados en este portal son propiedad de sus autores o titulares de los mismos.


Copyright © 2017-2024 Poeta Virtual Inc. Todos los derechos reservados.
Copyright © 2017-2024 Virtual Poet Inc. Worldwide Copyrights.