Una ventana rota, un horizonte,
una nube callada, una palabra,
un desierto que llora, una plegaria...

Un ser que ya no siente,
un silencio cansado,
una lágrima viva, una esperanza...

Y así transcurre el tiempo,
lentamente,
parsimoniosamente,
sin afectarle el bien,
sin inmutarle el mal,

¡Y tan callado!

Un tejado en la ruina,
un árbol a su lado,
una angustia,
un griterio joven,
un colegio,
cosas y cosas,
y así transcurre el tiempo.

Una mirada atenta,
una orilla sin rumbo,
y cosas y más cosas,
y el tiempo no para,
sigue distintos rumbos,
caminos y distancias...

Una vez perjudica,
otra vez beneficia,
lo cierto es que no para...

Quisieron enjaularlo,
para venderlo a trozos,
y el enjauló a la jaula.

La dejó prisionera,
de su intento baldío,
y allí quedó estancada,
como anexo a la historia...

Y así transcurre el tiempo,
porque el tiempo no para....

Entre cosas y cosas y más cosas,
el seguirá su ruta,
¡PORQUE EL TIEMPO NO PARA!

PD:(Dedico este poema tan querido a: Indark, Aurora García, anaMia, Raff, CoVAS, Mary Carmen, Azu, Clare y Jorge)

Fernando Pérez.