Me duele la cabeza, casi que no puedo mirar por el ojo derecho. Me duele la cabeza y me duele el alma si es que el alma duele.
De repente siento que la vida se escapa y se levanta ante mí en todos los seres que son en mí y que son en los otros.
¡Vieja loca!, les parecerá extraño esta expresión, pero desde hace un tiempo he venido escuchando eso de estar loca muy seguido refiriéndose a mí, hasta el ser que amo, me llama a veces loca mía. Y me pregunto, ¿será verdad ya que de tanto escucharlo tengo que admitir que a mis años la locura ha hecho presa de mí?
Miro hacia atrás, en mi pasado próximo y me veo correr de un ciber a otro, de un día cada vez más temprano para llegar con lluvia o con sol a la cita concertada, me veo atrevida, en un aeropuerto esperando a un ser que no sabía era un ángel o un asesino en serie, dirán el mismo riesgo corrió el otro, sí pero en este caso, fui yo la contactada y yo la que acepté...¿locura? Me veo, gastando lo que no tengo, me veo dejando la salud en cada llanto, en cada angustia, en cada descubrir que la verdad es una manera de algunos llevar la vida acomodándola a sus antojos y a sus intereses. Me veo creando personajes para ser para el otro, me veo queriendo hacer lo mejor y sólo conseguí morisquetas en lo payasa que hoy más que loca quizás me veo. Si dejar correr al corazón desbocado por los sentimientos de amor es una locura, pues lo admito, estoy loca. También he vivido mis ratos buenos, felices, pero estos me han costado tanto que ya ni sé, los amigos se mueren temprano, los que quedan me miran con preocupación, saben de mi espada de Damocles. Ahora mi familia , mis padres cada día más deteriorados, mi sobrina en peligro de su salud, mis hermanos, acabados y angustiados por las situaciones que viven moral y materialmente y yo impotente de tanta vida acumulada y que explotó de pronto.
Y yo en el vértice de tanta cosa, de tanto querer ser para al final no ser nada, ni nadie. Exijo respeto para respetar, exijo un mínimo de consideración. Trato, lucho, peleo, grito, las uñas desgarradas y ¿qué logro? sólo reclamos de una locura que parece es la que vivo realmente. Me sale terapia, me sale psiquiatra, porque parece no he entendido a mis años de otoño lo que la vida es. Soy una extraña en el mundo de los demás. Y a eso tengo que agregarle el mote de vieja, una vieja loca....

Migdalia B. Mansilla R.
Fecha: hoy cuando recuerdo las veces que hasta anoche me han dicho: "pero te volviste loca"
27/06/03

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