Se me escapan silencios,
y se truncan aquellas alboradas,
que quisieron amar demasiado deprisa,
sin algunos detalles inherentes,
al color azulado de los mares.
Si supieras que amar es compromiso,
que es palabra letal si se le pisa,
y se guarda en la gélida noche,
la que el dolor trajo como olvido...
¿Si supieras que el ser es entelequia,
si se entierra entre páginas platónicas,
y se cubre de barro y se cercena?
¡Cuanto me duelen las entrañas,
cuando muere la palabra entre tinieblas,
y te llamo insistente entre violetas!
y se derraman pétalos de rosas,
en los caminos de piedra que se marchan.
Si supieras cuantas cosas callé,
mientras pasaba la tristeza por mi casa,
para herir el pasado y dejarlo exhausto,
en aquella senda impávida del tiempo.
Si alcanzaras saber
cuanto lloré tu despedida,
¡Si supieras cuanto te amé en silencio!
¡SI SUPIERAS.......!
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