Cortejo fúnebre
ronda mi balcón
mi historia se postra en un sillón
un delirio... ¡es la fiebre!
Él que aguarda en un rincón
esperando, sin ser invitado
a esta humilde unión
no se siente, ni se oye un silbido
Solo frío viento
que recorre una habitación
no converso, ni miento
es una vaga reflexión
Meditación de dolor
y frió sentimiento
de triste desesperación
Mi gris color...
se esparce en gotas
que brotan de mi ilusión
ilusión pasajera sin boleto
se arrastra en una lenta persecución
Constantemente, va y viene
el sonido de su voz
duele hasta las huesos
y a la carne no entretiene
¡con un sentido beso!
Es un delirio
que viajo en un suspiro...
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