Podría comenzar
diciendo muchas cosas,
sin embargo,
siento que mis gestos
se agotan por momentos,
repentinamente.
Quisiera escribir este discurso,
en forma de vuelo de gorrión,
o más normal aún,
manchando a borbotones un papel,
o simplemente,
construyendo una oda en una vieja pared.
¡Cuan difícil me resulta
convertir mis pulsiones más profundas
en un cuerpo geométrico visible!!
Teoremas, cálculos, pensamientos, misterios, cubicar la mirada...!
Destronar la mentira y la insidia,
para que se vayan y no vuelvan,
para que siempre callen.
Redimir la palabra en todo su sentido,
las sílabas y versos,
los romances, los sonetos,
los corazones solitarios,
buscar en el error su parte de verdad,
y si aún no fuera suficiente,
liberar el misterio,
y convertirlo en enigma resoluble,
esculpir la razón,
estudiar sus contornos,
descubrir sus colores,
caminar por sus cimas,
pero sobre todo,
mostrar a los hombres,
¡LO QUE HAN HECHO DEL HOMBRE!

Fernando Pérez.