La gravidez de un poro dormido,
nebulosa aureola incomprendida,
sostén de vida en un olvido,
y tocando despacio mi vida
Tener un bebé cuando toda caricia,
es como pétalos de algodón,
hilvanando deseos de sonrisa,
viviendo por algún callejón.
Necesito mi flor abierta,
mis brazos fuertes,
y el poder de la mente correcta,
para llenarte de juguetes.
Es muy lento el destino,
y las oportunidades se cierran,
es tan lánguido el camino,
cuando en la nada te llenan.
Tener un bebé es un deseo,
pero es también mucha responsabilidad,
a eso es a lo que le temo,
y es mi reto ante esta sociedad.
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