Me niego a postular ambigüedades
con palabras oscuras y desiertas
así me cierren las endebles puertas
del honor al absurdo. ¡ Inequidades !
Escribo para mí, para profetas
con ganas de leer mis necedades,
rozando muchas veces nimiedades
o causas puras… y tal vez inquietas.
No he de alcanzar de la escritura… gloria
ni tampoco homenajes muy señeros,
serán mis portentosos compañeros
mis versos sin pasado y sin historia.
En el mundo profano de las letras
se quedan en el medio del camino
escritores nacidos sin destino
y a veces hasta el rey de los poetas.
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