Si me preguntas por mi príncipe azul
te diré que tarde a mi vida llegó,
pues el día que lo encontré
venía de la mano de otra mujer.

Tal vez la espera lo impacientó
y con otro amor se fue,
o quizás su corazón nunca vió
el amor que yo sentía por él.

A un lado de mi lo vi pasar
si acaso logré su mano estrechar,
solo palabras sencillas pude cruzar
con una mirada fría igual al mar.

Duele saber que teniéndolo cerca
no es posible llegarlo amar,
es doloroso vivir sin relegar
ese amor que no se pudo realizar.

Nunca lo vi en tiempo pasado
jamás supe de su existencia,
lo curioso de la coincidencia
es que ahora el esta casado.

No es fácil a una mujer conformar
con palabras de virtual olvidar,
porque me enamore del príncipe azul
y que tal vez hubieras podido ser tú.

Maria*