"Sean pocas tus palabras"
Dijo un Profeta antiguo,
quizás cumplió José
con ese mandato
pero su nobleza infinita,
su amor y generosidad floreció
como ejemplo para la humanidad.
Con los mensajes divinos
le fue encomendado ser el Padre
del Salvador,
y lleno de humildad
arropó a su familia con amor
Porque la luz en la oscuridad
es el fuerte destello
de las estrellas, suficiente
para iluminar
con su sagrada claridad
al mundo en cada rincón,
-energía pura del amor,
regocijo del corazón-
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