No todas las miradas se dirigieron a él,
una miró a una estrella brillante y roja,
especialmente misteriosa y refinada
expidió un haz plateado hacia la nada.
Su futuro desvarió, ya se perdió,
no hizo efecto aquel acto heroico,
la verdad se impuso en su alma,
la salvación llegó en aquel instante.
El franco amor de aquel corazón olvidado
destruyó las ambiciones inmediatas
y las convirtió en sana honestidad
Su realidad le plantó cara,
su vida se calmó,
la luz ya es clara.
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