Era el jardn espacio del pasado.
Camino de mutuas ilusiones.
El csped creca libremente
como el amor en clido verano.
El Sol despierta encandilado
en lugar ausente descarnado
donde el caf espera la otra taza
y la merienda el plato compaero.
Tiende la mesa y cuece la comida.
Sobran porciones, el vaso y la bebida.
Faltan su rostro, sus manos, su sonrisa.
Solo una silla, silente compaa.
Palabras que enhebran pensamientos
para abrazar kilmetros de pena.
Una pantalla en busca de otros puertos
y aquel vaco que trepa los cristales.
Hay tanta paz donde naci el hasto.
Tanto lugar donde muri el afecto
y el desamor entr por la ventana
y el corazn se hel por tanto fro.
Solo el silencio habita cada tarde.
Solo la noche camina por la casa.
Solo tan solo llor por la maana
en su dolor de pjaro sin nido.
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