No conforme con desearte
está esta página en blanco,
esperanzada la pobre
en descubrir de ti algo.
Esperanzada la pobre
vacía y pobre cama,
mira como se retuerce
de sus dolores de espalda
y lo mucho que pelean
sus olores y sus manchas.
Mira nuestro viejo espejo
cuanta tristeza emana,
tan lleno de cicatrices
vacíos los poros del alma;
a veces cuando se enoja
viene y me escupe a la cara.
Ve cómo se regocijan
el polvo y las telarañas,
estas cosas y estos libros
como si no hicieras falta,
como si no echaran de menos
el café en la madrugada.
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