Y busco con ahínco, cuanta paz
exista, donde pueda permitir
que toda la virtud de mi existir
se manifieste libre de antifaz.
Porque para soñar y ser capaz
de parecer feliz, sin incurrir
en tacha que se pueda permitir,
no sólo es necesario ser tenaz,
sino que además hace falta estima,
por ver cómo se mueve la fortuna,
sin tener que morir en el intento,
cuidando no estimar con mucha grima
la distancia que media entre la luna
y la tierra sin otro fundamento.
|