En medio de las olas de un mar embravecido
un velero se enfrenta en lucha con el viento,
el tiempo no mejora y parece que perdido
se inclina peligroso buscando al sotavento.

El horizonte muestra la curva de las olas,
las nubes acumulan relámpagos y truenos
y dentro del velero dos almas están solas
buscando en ese instante a sus momentos buenos

Se aleja ya la tarde y se acerca la noche,
y en medio del peligro de ese mar tempestuoso
seguro que esas almas, sin miedo y sin reproche,
al fin han comprendido que el amor es hermoso.

En ese mismo instante un milagro sucede:
Las nubes se disipan... se acaba la tormenta
y entonces las dos almas saben que sí se puede
lograr conformar juntos una vida contenta.

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Maracaibo, 16/09/08

Mariano Bequer