Arenas de tiempo inexorable
impusieron su incansable paso
al contemplar expectativa
su acelerado caminar.
Te mirabas y admirabas orgullosa
evocando etapas varias de tu vida,
niña de espejismos e ilusiones
audaz atrevimiento te sorprende.
Te creias la princesita bella
de un cuento inacabado.
La vida te sonreía abiertamente
siendo el centro y admiración de todos.
Otra etapa llegó a tu vida
te casaste esperanzada, e ilusionada,
el sendero de tu destino
embarco casí toda tu existencia.
Apenas sin darte cuenta
tus hijos se emanciparon,
te dieron hermosos nietos
colmando todas tus expectativas.
Atrás quedó la exquisitez de antaño
tu bello rostro y figura
fueron al compás de los años.
Aunque el maravilloso brillo de tus ojos
refleja la dulzura de tu alma
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