Beberé tus lágrimas
para recordar mi pasado
sintiendo en cada gota,
una porción de mi vida perdida en la intemperie del tiempo
tan ajena de olores,
de mi sangre sobre piedras que arden bajo el sol olvido.
Solo palabras en un instante de brillo,
de penumbras,
que embriaga mi alma sin el placer del vino,
rojo y áspero,
que enjugaba mis cuerdas.
Sin sangre no hay pacto,
emblema de vida,
sin rescate no hay esperanza.
Mis lágrimas se tornan vino,
las tuyas saben a sangre,
disfrutaré ambas,
y entre asco y placer
vomitaré mi hígado en el hemorrágico mar de intestinos,
gritare tu nombre,
extenderé mi vela rogando encontrarte en algún lugar.
Y en mi flamear,
perdiendo vigor ante la fría distancia,
arrojare mi perfume deseo para cautivar del ambiente a cuerpos en celo,
que fogueen mis pasiones,
sustentando la memoria de tus besos pisare lo amargo de mi vida,
y del veneno entre mis pies jalaré tus \"te quiero\" de mi alma,
para sentirlos una vez mas sobre mi piel.
Escudriñare en mi sudor tu hormonas,
buscaré tu mirada en el horizonte y elevaré una vez mas mi copa,
llena de rojo vino,
de sangre
y gritare tu nombre.
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