Y vente tú a saber si fue el cariño
que permitiendo ser indestructible,
hizo de mi amistad el combustible
capaz de superarme como un niño.
Pues si el amor nos hace el mejor guiño,
cualquier suposición se hace posible
resultando bastante comprensible
hasta que se convierta en un pestiño.
Pero si no me apaño muy dispuesto
a tolerar absurdas fantasías
en el medio feroz que me sacudo,
de poco vale ver con quien me acuesto
si queriendo ocultar mis tropelías
sin voz me quede para siempre mudo.-
|