Cuando intuyo que vivo tan inmerso
en medio de un grandioso despilfarro,
sólo pienso de veras con desgarro
cuanto dolor acecha al universo.
Y con razón lo escribo todo en verso
de donde ,como puedo, bien me agarro,
para así doblegar mejor el barro
por si acaso me viera muy disperso.
Y aunque llegue a vencer las tentaciones
de parecerme cada vez al fuerte,
difícil se plantea mi camino,
al rondar entre tantos socavones
tratando de cambiar mi mala suerte,
cuando no la razón de mi destino.
|