A la justa denuncia ciudadana
el gobierno ni de coña corresponde,
porque jamás de corazón responde
y por supuesto no le da la gana.

Esto parece todo una tangana
organizada en la mansión del conde,
por no saber el cuándo ya ni el dónde
con quien se ríe el rey por la mañana.

Porque clara no está quizás la cosa
si una princesa duerme en su cocina
y le lleva a la caza de elefantes,

al presumir con su uniforme rosa
una vez que le saquen de la tina
y a dormir se hayan ido los infantes.

Luis Pérez