Caminando perplejo en el olvido
de nuevo el alma rota se lastima,
pues cascada la propia autoestima
me da lo mismo ya vagar perdido.
Porque darle a la vida su sentido
no significa conquistar la cima,
sino que de alguna forma legitima
el andar por el mundo precavido.
Y porque garantías pocas tengo
alerta me despierto cada noche
previniendo cualquier sutil sorpresa,
pues en la cuerda floja me mantengo
víctima de sufrir algún reproche
que exista sin razón sobre la mesa.-
|