Algo de amor debe quedar oculto
dentro del corazón de los humanos,
y no estaría feo que entre hermanos
se unan para rendir a Dios su culto;
suplicando entre todos el indulto
que no les haga parecer villanos,
cumplidores devotos puritanos
especialistas en rehuir el bulto.
No puede ser tan cierta la bondad
de quien alza su grito hacia los cielos
robando sin ningún remordimiento
al callar de su hacienda la mitad,
evitando arriesgar sus rascacielos,
claro, sin el menor remordimiento.
|