Consumida y confusa mi alma luce,
de llorar a menudo no se agota,
será que los fracasos los traduce
en virtudes que fácil ni lo nota.
Pues útil me resulta el acertijo
que adivinar a solas hoy pudiera,
porque milagros yo jamás le exijo
aunque sin pan alguna vez me viera.
Ojalá la experiencia lo permita
y de muchos prejuicios me desprenda,
porque vivir así también me irrita
sin quitar de mis ojos ya la venda.
Pues no quiero pasar por mentiroso
haciéndome de gratis el gracioso.-
|