DESGRACIADA PARECE NUESTRA VIDA
Desgraciada parece nuestra vida
por causas de un señor, maldita sea,
que aún viendo la mar bravía y fea
no la estimo perversa ni aburrida.
Hoy consejos que nadie me los pida
aunque mis pérfido sonetos lea,
pues bastaría que bufón me crea
para que respirar aún me impida.
Y si por este mundo compañero
nos vemos tan livianos de equipaje
no será, que ni Dios lo quiera, en vano,
que al carajo se vaya mi dinero
si por gastármelo pagando un viaje
por la jeta los robe algún tirano.-
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