CREER NO LOGRO SIEMPRE LO QUE PIENSO
Creer no logro siempre lo que pienso
si al despertarme caigo de narices,
pues conservando aún las cicatrices
un vacío tenaz me deja tenso.
A buen seguro que seré propenso
a mezclar si pudiera los matices,
al añadir en el descanso actrices
que dejaran al público en suspenso.
Por semejantes argumentos, chico,
obligado me veo a vivir solo
sin mujer, sin chiquillos ni mascotas,
quizás porque le doy bastante al pico
y dando caña al corazón me inmolo
hasta acabar con mis narices rotas.
|