YO ME CONFIESO DIOS Y PADRE NUESTRO
Yo me confieso Dios y Padre Nuestro
desoyendo a la curia vaticana,
si lejos de la iglesia puritana
igual me consideran un cabestro.
Porque me miro como un vil ancestro,
retazo de razón tan poco humana,
y tomo sus consejos con desgana
sin juzgar por deporte a su maestro.
Poca atención le presto a sus condenas
y si puedo desoigo sus argucias
quitándome de encima sus recados,
pues me han dado un vivir lleno de penas
haciéndome sufrir entre minucias
por muy simples que fueran mis pecados.
|