SONETO.-
Sufro queriendo ser un caballero
de la experiencia de mi propia vida,
mientras nadie me acuse de suicida
por andar por el mundo bien entero.
Pues trabajando siempre por dinero
de vista nunca pierdo la salida,
porque teniendo el alma muy curtida
poner a salvo trato mi trasero.
Porque la hipocresía me revienta,
ocultar lo que pienso no consigo
por más que a veces pierda los papeles,
porque mi honor jamás pongo en venta
queriendo perdonar a un testigo
que quedarse pretenda con mis pieles.
|