1

EXISTE UNA MORAL CONTAMINADA

Existe una moral contaminada
que al ser humano, creo, poco ayuda,
a no ser que en el alma le sacuda
exigiendo el derecho de pernada.

Por eso nunca des por terminada
tu misi�n porque siendo terca o muda
de pelar la mujer que te desnuda
f�cil que del calor est� tocada.

Ya sabes t� que yo del cruel espanto
estoy m�s que curado, compa�ero,
que sin confundir culos ni tetas

con leer tus sonetos ya me encanto,
porque escritos est�n con tanto esmero
que ni durmiendo agotas tus recetas.-

2

LA MUJER PALIDECE PREGUNTANDO

La mujer palidece preguntando
si digna no lo fuera de su amante,
asunto que se vuelve delirante
cuando decide ella ponerse al mando.

Que si a veces se duerme protestando,
quien sabe si al pensarlo diera el cante
y obviando que su pr�ncipe se espante,
vaya y decida al fin cambiar de bando.

Porque entenderse est� bien en la cama
si el negocio resulta suficiente
para poder firmar la convivencia,

pero menudo no ser�a el drama
si funcionando as� cualquier pariente
va y se duerme en la luna de Valencia.-

3

SE CONVIERTEN LAS NORMAS EN TIRANAS

Se convierten las normas en tiranas
cuando torpes quiz�s no evolucionan,
y el terreno al cazurro siempre abonan
legislando ordenanzas todas vanas.

Quiz�s por eso lucen tan ufanas
que sus rencillas diarias no razonan,
y el mea culpa rara vez entonan
cuando de frente chocan con las canas.

Pudiera ser un tema de prejuicios
que descoloca a quienes lo practican
negando sus instintos animales,

salvo que convertidos hoy en vicios
a los poderes castos perjudican
por no considerarlos muy normales.-

Luis Pérez