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LA GUERRA SANTA CONTRA LOS INFIELES
La guerra santa contra los infieles
tantas contradicciones justifica,
que incluso al buen poltico salpica
al confundir a posta sus papeles.
Quien sabe si al dormirse en los laureles
el frutero con sorna le critica,
aunque lo niegue con la boca chica
al intentar cobras sus aranceles.
Por eso yo acechando a los bribones
de madrugada alerta me despierto
y al mundo me conecto con reservas,
porque ya expuesto a mil provocaciones
no quiero que me lleve nadie la huerto
donde venda tambin sus malas hierbas.-
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