SONETO.-
Malo que nos maneje el fanatismo,
que siendo como sádicos chacales
al practicar sus hábitos normales,
al descubierto deja el intrusismo.
No confío en ningún nacionalismo
al sufrir sus abusos garrafales,
comportamiento propio de animales
que practica de gorra el servilismo.
Que nos amemos, dicen, como humanos,
muchas instituciones sospechosas
a menudo, que dar me dan la risa,
pues siendo como somos tan tiranos
decisiones tomamos horrorosas
tan pronto nos cambiamos de camisa.
|